Caro es práctica, dulce y sabia.

Ayer por la tarde fui a buscar a Caro a su curro. Trabaja en una agencia por Chueca y en cuanto me vio aparecer, lo supo. Murmuró muchas cosas bonitas que ya no recuerdo y me abrazó muy fuerte. En esos momentos tampoco lloré, sólo pensé que Jota era imbécil. Hay que joderse. Él estaba en el extranjero, yo llevaba diez días sin cogerle el teléfono y seguro que ni remotamente era capaz de sospechar lo que pasaba (y eso que un día antes de hacerme la prueba de embarazo le comenté que no me venía la regla). Caro me miraba a los ojos mientras repetía suavecito y de forma pausada que no me preocupara por nada. “Gilipollas ¿porqué no me lo has dicho antes?” Me oí a mi misma contestar “no podía contártelo, tenías que entregar la campaña” y Caro me abrazó otra vez  mientras empezó a tararear nuestro HSL (Himno para las Situaciones Límite, la canción “Resistiré” del Duo Dinámico).

Precisamente en ese instante supe que ya no iba a llorar.